Cristóbal Colón Cuando y dónde nació, de donde era, que pais
Cristóbal Colón ¿Cuando y dónde nació, de donde era, que país, cual nacionalidad? Este tipo de preguntas ha abrumado a los curiosos y a los mismos investigadores de la biografía del navegante y para lo cual se dicen muchas cosas. He juntado dos post anteriores para dar respuesta a estas inquietudes.
¿Dónde nació? ¿cual era su nacionalidad o país de origen?
Estas son las hipótesis plausibles y la discusión planteada en torno a esto. Generalmente la más aceptada es la versión genovesa.
Génova
¿Cómo no hablar de un tema como este? Recordando algo de la discusión sobre la presunta patria de Colon.
Hasta 1571 nadie puso en duda el origen genovés de Cristóbal Colón. Contemporáneos del Almirante también lo corroboran así, dejando huella en la literatura histórica: Pedro Mártir de Anglería, humanista italiano; el sacerdote Andrés Benáldez; los cronistas españoles, Bartolomé de las Casas, Gonzalo Fernández de Oviedo y Valdés, Estéban de Garibay, Alonso Estanques y Antonio de Herrera; compatriotas de Cristóbal Colón como el navegante Antonio Gallo, Agustino Giustiniani, Battista Fregoso, Bartolomeo Senarega y Nicolo Oderigo.
Pero no solo ellos hablaban de la naturaleza ligur de Colón. También lo hacían los venecianos Angelo Trevisan (amigo del Almirante) y el cardenal Pietro Bemba. Así lo ratifican también el lombardo Paolo Giovio, los cronistas portugueses Ruy da Pina y João Barros. Se calcula que por lo menos 90 contemporáneos (en algún escrito) dieron fe de su nacimiento en dicha ciudad de Génova.
Pero ¡Oh paradoja!
El primero en dudar de su patria chica fue Hernando Colón, su propio hijo. Y se armó el sambenito. Una veintena de ciudades han reclamado para si ser el lugar de origen de Colón. Pero la única que posee solidez argumental y documental hasta el momento sigue siendo Génova.[1]
En 1478 cuando otorga escritura de mayorazgo a su hijo Diego exigió “que tenga y sostenga siempre en la ciudad de Génova una persona de nuestro linage, que tenga allí casa, y mujer y le ordene renta con que se puede vivir honestamente, como persona tan llegada a nuestro linage y haga pié y rrayz en la dicha Ciudad, como natural Della, porque podrá haver de la dicha ciudad ayuda, y fabor en las cosas del menestre suyo, puesque della salí y en ella nací”. Luego agrega que su hijo “procure, y se trabaje siempre por la honra, y bien, y acrecentamiento de la ciudad de Génova, y ponga todas las fuerzas y bienes a defender y aumentar el bien y honra de la República della”.
Pero eso no fue todo, el 19 de mayo de 1506, previendo la inminencia de su muerte, hereda crecidas sumas de dinero a los descendientes de los negociantes genoveses que fueron en otros tiempos sus benefactores[2].
No obsta recordar que Génova se caracterizaba por ser un emporio comercial y bancario, donde primaba lo mercantil y la moral práctica[3].
[1] Svet Yákob, Cristóbal Colón. Siglos y hombres, v centenario del descubrimiento de América: encuentro de culturas y continentes, Editorial progreso Moscú, 1972, traducción al español 1987.
[2] “A los herederos de Gerónimo del Puerto, chanceller en Génova, 20 ducados o su valor. A Antonio Vazo, mercader genovés, que solía vivir en Lisboa, 2.500 reales de Portugal, que son siete ducados poco más, a razón de 375 reales el ducado…A los herederos de Luis Centurión Escoto, mercader genovés, 30.000 reales de Portugal…A esos mismos herederos y a los herederos de Paulo de Negro, genovés, 100 ducados o su valor…”
[3] Bajo este aserto serían entonces malos cristianos, puesto que comerciaban por igual con Turcos, Tártaros y egipcios; si les convenía le ayudaban a los monarcas musulmanes a arrasar tierras cristianas, por ejemplo ( o traficaban con esclavos). Actuaban como asegurando el bienestar material en primera instancia, sin descuidar el aspecto espiritual: para ello empleaban la superstición; de todos los sitios recorridos traían a Génova reliquias y las veneraban como los que más.
Patrias del almirante
Miremos como ejercicio intelectual cuales son las presuntas patrias de Cristóbal Colón.
En total 26 pretendientes a este honor ha tenido la contienda: catorce ciudades italianas y doce naciones. Por ejemplo, para mencionar las hipótesis que menos trascendencia han tenido al respecto: han puesto a nacer a Cristóbal Colón en Piasenza, Savona, Cogoletto, Cucureo, Arbilozi, Nervi…Otros sostuvieron, sin fundamento sostenible hasta el presente, que Colón era francés (hipótesis de Jean Colombo)[1] o inglés aún (hipótesis de Charles Mollow).
Dos osados religiosos, Casabianca y Casanova volvieron a Cristóbal Colón, Corso, lo pusieron a nacer en Calvi, una ciudad de Córcega. Pero esta argumentación tan endeble tampoco aguantó la confrontación científica. No faltó quien hiciera de Colón ciudadano bizantino por poner otro ejemplo traído de los cabellos.
Pero esas suposiciones tenían varias pautas en común.
Veamos:
- Suposiciones acerca del apellido: Dado que los apellidos Colombo, Colón y Colomo tenía muchos entronques familiares en Italia, España, Francia y Portugal, no ha faltado quien presuma que allí hay asidero para hacer de Cristóbal Colón su descendiente.
- Suposiciones simbólicas: imaginativos escritores presumen que en las iniciales de la firma de Cristóbal Colón hay escritura simbólica. De ahí deducen que fue, judío, portugués o extremeño.
- Suposiciones lingüísticas: de la redacción del Almirante se extraían locuciones y giros verbales que “demostraban” la lengua vernácula de Colón.
Los enemigos de la patria genovesa de Colón, no hallan conexión entre el lanero pobre del que después de 1473 no existían documentos en Génova y el ilustre navegante: en 1825 Martín Fernández de Navarrete publica una colección de documentos sobre la historia del descubrimiento de América, donde incluye por supuesto la escritura de la constitución del Mayorazgo donde confirma como heredero universal a su hijo Diego. El quid de asunto radicaba en que era una copia no certificada de la escritura (no poseía valor jurídico). Dicho documento se había hallado en Simancas.
En 1904 se encuentra el famoso “documento de Asereto” que confirma la fecha de nacimiento de Colón y relaciona la etapa genovesa y lusitana del navegante. Pero dejaba dudas porque estaba fechado de 1479; aun no se hallaba la conexión directa entre este personaje y quien hizo el descubrimiento de América.
En 1925 la investigadora norteamericana Alicia B. Gould y Quincy halló en el archivo de Simancas “el documento extendido el 28 de septiembre de 1501, con todas las firmas y sellos estampados, que confirma la escritura de la institución del mayorazgo, hecha en 1498”.[2]Luego entonces, dentro de la relatividad del conocimiento científico en ciencias sociales, ya no hay dudas entre los historiadores (no ya entre la gente del común y la prensa sensacionalista) que el lanero pobre de Génova y quien firmó la institución del mayorazgo son el mismo personaje.
[1] Claro que no faltó quien lo hiciese nacer en Burdeos, Borgoña y Saboya.
[2] Svet Yákob, Cristóbal Colón. Siglos y hombres, v centenario del descubrimiento de América: encuentro de culturas y continentes, Editorial progreso Moscú, 1972, traducción al español 1987.
En 1904 se encuentra el famoso “documento de Asereto” que confirma la fecha de nacimiento de Colón y relaciona la etapa genovesa y lusitana del navegante. Pero dejaba dudas porque estaba fechado de 1479; aun no se hallaba la conexión directa entre este personaje y quien hizo el descubrimiento de América.
En 1925 la investigadora norteamericana Alicia B. Gould y Quincy halló en el archivo de Simancas “el documento extendido el 28 de septiembre de 1501, con todas las firmas y sellos estampados, que confirma la escritura de la institución del mayorazgo, hecha en 1498”.[2]Luego entonces, dentro de la relatividad del conocimiento científico en ciencias sociales, ya no hay dudas entre los historiadores (no ya entre la gente del común y la prensa sensacionalista) que el lanero pobre de Génova y quien firmó la institución del mayorazgo son el mismo personaje.
[1] Claro que no faltó quien lo hiciese nacer en Burdeos, Borgoña y Saboya.
[2] Svet Yákob, Cristóbal Colón. Siglos y hombres, v centenario del descubrimiento de América: encuentro de culturas y continentes, Editorial progreso Moscú, 1972, traducción al español 1987.
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